La nieta de fin de semana del libro Buscando tesoros
Parque Nacional de Iguazú, Misiones, Argentina
Tal vez fue el sabor de las arepas, o sencillamente el volver a escuchar ese acentico colombiano, después de tanto tiempo. Tal vez, fue simplemente el destino escrito en los cielos de Diego. El caso es que los dos comprendieron que había llegado el momento de echar raíces y de establecerse en Barichara.
Y así fue como años después, Carito invitaría a las amiguitas de Dora a visitar la finca en fines de semana. Extendería la invitación a Juanita y Lina Marcela y a las tres les enseñaría a montar a caballo, a subirse a los árboles y a gozar la vida. Escucharían fascinadas a sus tíos, al contarles por las noches, las intimas visiones de ese maravilloso mundo del Circo de Los Hermanos García y se llevarían las historias a sus almohadas, para convertirlas después en dulces sueños.
¿En cuántas ocasiones se repiten las historias de nueva cuenta? Sencillamente cambian los nombres, se modifican las fechas y posiblemente algunos otros detalles secundarios; pero la historia, en lo esencial, vuelve a suceder nuevamente. De esta manera, la pequeña Dora con el paso de los años, llegó a ser la joven Dora.
Y así…