La nieta de fin de semana del libro Buscando tesoros
Ciudad de Popayán, Departamento del Cauca, Colombia
El imperioso silencio, puntualizado únicamente por el redoble constante del tambor, el que se interrumpió cuando Mariana se lanzó de su trapecio, dando piruetas en el aire y finalmente uniéndose de manos con Odín en las alturas.
En ese momento como si fueran uno solo, el público con su ovación y los gritos de admiración, aunado a la música de la banda, soltaron el suspenso contenido en sus almas y corazones con un sonoro estruendo general. El acto siguió por quince interminables minutos y en ellos, Oscar junto con todos los presentes, no fueron capaces de despegar la vista y toda su atención de las inmensas alturas de la gran carpa amarilla con franjas azules.
Sin dar un respiro, como por arte de magia, apareció de nuevo Oswaldo, su figura iluminada nuevamente al centro, para presentar el acto de cierre de esa noche tan espectacular:
«¡Señores y Señoras! Nos complacemos en presentar para Ustedes, nuestro atractivo principal, nunca antes visto en Arequipa. Con Ustedes, en esta noche sin igual, nuestra estrella, la magnífica, la única, la sin rival, la incomparable y la hermosa Carito Marroquí y La Relincha, su compañera sin igual…».