La nieta de fin de semana del libro Buscando tesoros
El Cable, ciudad de Manizales, Caldas. Colombia
Los papás de las hermanas Marroqui, como las conocen en el medio de los circos, eran originarios de la ciudad de Manizales, situada en la parte central de Colombia. La ciudad está asentada en lo alto de la cordillera central y desde ella, se dominan los paisajes de la zona cafetera. La calle Santander, es su única calle horizontal y a la vez, la avenida principal de la ciudad. Todas las demás calles descienden o ascienden a ella como rampas casi verticales, dentro de esa topografía tan extremadamente abrupta. Se podría considerar la ciudad de los paisajes, puesto que, al caminar por la Santander, el peatón disfruta de una vista sin interrupción hacia ambos lados, tan extensa, como el alcance de su visión.
El clima de Manizales, salvo en algunos días del año, oscila entre templado y demasiado frío. Sus días igualmente varían de nublados a neblinosos, esa nubosidad tan propia llegaba incluso, en ciertos días, a cubrir la ciudad totalmente con un manto espeso de pesadas nubes. Cuando brilla… el sol es espectacular, pues es un sol de alta montaña.
Cuando la mamá de las dos hermanas Marroqui, apenas se encontraba en su primer mes de embarazo, se mudaron al sur, aprovechando una oportunidad de trabajo para su papá. La mamá llegó embarazada y no fue capaz de adaptarse a los intensos calores de la ciudad de Cali. Durante todo el embarazo apenas comía, pues el calor la fatigaba y no le apetecía. La pobre mujer pasaba el día tomando líquidos para hidratarse, y en vez de ganar peso, comenzó a enflacar.