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Una parcela de tierra
La pregunta más difícil de su vida, la formuló de niño «Oiga Camila, estuve hablando con mi Apito. Dice que el año entrante ya dejaremos de ser niños, ¿cómo le parece?». Comentó Magnífico con un cierto aire de misterio. Sin poder resistir el dejar pasar la oportunidad, Camila se lo gozó al contestarle: «Homme, yo…
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Cosquilleos y falta de aliento
Algunos recuerdos se olvidan con el tiempo, pero los retratos del corazón jamás pierden su resplandor Cuando ya todos se habían ido, acompañó a Camila a su casa. Caminaban por un sendero que acortaba la distancia a la vereda donde vivía la niña. Al estar caminando o montando en las alturas,…
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El niño del pino
Y cuando llegaba a su lugarcito especial, ese pequeño espacio donde el mundo era solamente para él, tan suyo y de nadie más, el que se constituía en un refugio o en una guarida… en ese momento, él era feliz La torta de cumpleaños, también la había preparado su Amita a escondidas, pues quería sorprender a…
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En la finca del cumpleañero
Esos días bañados de sol y de cielos azules… se fueron para no volver Bajo un sol de mediodía, entraron todos los invitados a la casa. Acomodaron las zorras y los caballos de los jinetes inmediatamente después del portón, en el camino al cobertizo de las vacas. Mientras se acomodaban,…
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Llegando a la meta
Intentar lo desconocido, puede ser aún más satisfactorio que alcanzarlo Se escuchaban los gritos de la muchedumbre, dispuesta en ambos lados del camino frente al portón. Observaban entusiasmados a los dos corredores acercarse a una velocidad impresionante. Muchos de los niños se encontraban encaramados sobre el cerco. Hasta Lencha y las otras vacas, poco antes…
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En la recta final
En ocasiones se preguntaba maravillado… ¿dónde obtenía las fuerzas para seguir? Poco antes de la curva, él ya había alcanzado a Danilo, y gradualmente fue tomando la delantera. Los dos chicos corrían con todas sus fuerzas, como si su vida dependiera de ello. A mitad del ascenso en curva, Magnífico sorpresivamente se le…
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Tres para el campeón
Nada como la infancia, cuando aún sin alas, es posible volar «¡Listo! Una para la zorra, dos para el conejillo y tres al ganador…», gritó Danilo, arrancando a toda velocidad, desde el primer conteo. Pero en esta ocasión, Magnífico se encontraba en su terruño, claro que sí. Él conocía perfectamente el…
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La espera en el camino
Disfrutaba correr sin zapatos por los caminos, sintiendo la tierra desmoronarse bajo sus pies «Esperemos a que se adelanten todos y lleguen hasta la casa, para que puedan observar claramente cómo le vuelvo a ganar, ¿qué le parece?», le comentó Danilo a Magnífico; quién a su vez, se encontraba entregado a la tarea…
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las canciones de moda
y qué de la vida, sin música para acompañarla… Bajo la fresca sombra de los árboles del parque, en la segunda zorra, se encontraban sentados, uno al lado del otro, Magnífico y Camila. Sostenían una alegre conversación y se encontraban absortos en su propio mundo. A su lado, rodeándolos, y en la…